LOS HOMBRES QUE HAN HECHO EL MAPA DEL CIELO
El cielo ha sido siempre para el hombre fuente de profundos misterios que ansiaba develar; de ahí que quienes se especializaron en su estudio convirtieran la Tierra en una pequeña morada desde donde observar el maravilloso Universo.
La Astronomía es la ciencia que nos comunica cuantos conocimientos posee el hombre sobre los cuerpos celestes, y astrónomos son los sabios que se dedican al cultivo de esta ciencia y procuran adquirir cada día nuevos conocimientos relativos a los astros. De esta ciencia y de estos sabios depende, en parte, el gobierno de nuestra vida diaria, regulada por la marcha armoniosa de los astros. Probablemente es la ciencia más antigua; y es, además, sin duda, la más admirable, porque contiene la historia más espléndida e interesante.
Los primeros astrónomos fueron los antiguos pastores, quienes, mientras por la noche guardaban el ganado en los campos, pasaban horas enteras contemplando los astros, tratando de averiguar qué podían ser aquellos puntos luminosos que tanto los cautivaban; en su ignorancia, se limitaban a hacer cálculos acerca de su significado. No sabemos quién empezó este estudio; nos consta que los caldeos y los egipcios deben contarse entre los primeros pueblos que lo cultivaron, pero la India y la China alegan haberlo iniciado tres mil años antes de Jesucristo.
Es indudable que los astrónomos chinos hubieran preferido que su soberano no sintiese tanta afición a la astronomía, porque en aquel país y en aquellas épocas los sabios que estudiaban el firmamento estaban obligados a predecir la fecha en que habrían de ocurrir los eclipses, a fin de que el pueblo pudiera encontrarse preparado para ahuyentar, a fuerza de estruendos y ruidos, al monstruo que aparecía en el cielo con el intento de tragarse al Sol. Ahora bien, si los astrónomos no acertaban exactamente con la fecha, eran irremisiblemente condenados a muerte.
Esto nos demuestra que no eran muy exactos los conocimientos astronómicos de los chinos, y con ellos corrían parejos los de los demás pueblos. El primer hombre que hizo un estudio diligente de la astronomía fue Tales, uno de los siete sabios de Grecia. Nació en el año 640 a. de J. C y murió en el 556, después de haber consagrado enteramente su vida al examen de los problemas de la Naturaleza. Fue el primero que se convenció de que el Sol, la Luna y las estrellas eran algo más que simples señales colocadas en el firmamento, para indicar las operaciones de los malos genios y de los dioses, y fue también el primero en diseñar mapas donde se mostraba la posición que ocupaban los astros más notables.
Cerca de cuatro siglos tardó en aparecer otro gran astrónomo, Hiparco, sabio griego que vivió hacia el año 150 antes de nuestra era.
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