Un gran precursor de la actual cinematografía
Nacido en París en 1861, Georges Mélies tenía 34 años de edad en el momento de la invención de los hermanos Lumiére. Este antiguo prestidigitador fue el primero en darse cuenta de que el cine no necesita la verosimilitud ni la lógica para subsistir, sino que, ante todo y sobre todo, es una fábrica de ilusiones. Mélies no se interesó por la realidad, sino que imaginó una serie de cuentos fantásticos que por mucho tiempo constituyeron la admiración de grandes y chicos. Méliés fue un gran precursor. Comprendió antes que nadie los recursos ilimitados del truco fotográfico puesto al servicio de una imaginación sin trabas. Se hizo el realizador de grandes aventuras, de los cuentos infantiles y, con una inventiva constante, una virtuosidad de malabarista de la imaginación, creó una enorme cantidad de filmes de una calidad poética indiscutible.
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