¿Por qué la botella térmica conserva mucho tiempo la temperatura del contenido?


Una botella térmica es un frasco que tiene la propiedad de conservar por espacio de mucho tiempo la temperatura de los líquidos. Térmico es una palabra derivada de la voz griega thermos, que significa calor; pero no es un nombre muy apropiado para la botella, porque si bien evita que se enfríen los líquidos calientes, impide también que se eleve la temperatura de los líquidos fríos que depositamos en él. Este hecho nos da la clave de lo que ocurre, si tenemos ideas claras y precisas respecto de la naturaleza del calor. El calor es una cosa positiva, y el frío viene a ser la ausencia de aquél. Por consiguiente, para que este recipiente conserve la temperatura elevada de los líquidos calientes que contenga, preciso será que de una manera o de otra impida que se escape el calor que existe en el interior; y para que no permita que se eleve la temperatura de los líquidos fríos, indispensable será que evite que el calor exterior penetre en su parte interna.

Ahora bien, todos sabemos que una manta de lana, por ejemplo, obra de esa manera. Conserva los objetos calientes, porque evita que se escape su calor, e impide que el hielo se funda, porque no deja que el calor llegue hasta él, y ambas cosas son consecuencia de que la lana es muy mala conductora del calor.

Así, pues, las botellas térmicas deben ser muy malas conductoras del calor. Entre su pared interior y la exterior existe un espacio en el cual se hace el vacío del modo más perfecto posible. Si en dicho espacio hubiese aire en la cantidad usual, conduciría el calor de la pared interior a. la exterior, y recíprocamente; pero si no lo hay, no es posible que lo traspase el calor sino con gran lentitud, pues la doble pared es como una zanja que al calor le es muy difícil de salvar.