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Curso que sigue una gota de sangre recorriendo las venas

Supongamos que la gota de sangre, que estamos observando, sigue la arteria aorta en toda su extensión, en vez de desviarse por algunas de las ramas de su trayecto, y que alcanzando, al cabo, sus ramas terminales, llega finalmente hasta la extremidad inferior de la pierna izquierda y pasa a través de la red capilar encargada de la nutrición de los dedos del pie, desde donde emprende el regreso de tan largo viaje, siguiendo las venas. Pero, como es natural, cuando nuestra gota de sangre llega a estos vasos, se ha impurificado otra vez, y se ha vuelto de un color rojo muy oscuro. No va, sin embargo, directamente a regenerarse en los pulmones, porque la fuerza que la impulsa hacia el corazón está casi agotada; así pues, en vez de tomar la dirección de los pulmones se encamina al corazón y así completa el círculo mayor de la circulación. En el curso de este trayecto de regreso, alcanza una vena de gran calibre que se abre en la aurícula derecha. Cuando la mencionada cavidad está llena, se contrae y lanza la sangre en ella contenida al correspondiente ventrículo, el cual, contrayéndose a su vez, manda la sangre a los pulmones. Vuelve de ellos pura y regenerada, habiendo tomado un color rojo escarlata, y entra de nuevo en el corazón por la aurícula izquierda, desde donde empieza de nuevo el curso de la gran circulación. Vemos, pues, que la sangre describe dos círculos que tienen un punto común en el corazón. No debemos olvidar, sin embargo, que no toda la purificación de la sangre tiene exclusivamente lugar en los pulmones. Muchas de las sustancias de desecho que el líquido vital contiene, son eliminadas por la piel y los riñones; además, durante su trayecto de regreso al corazón, ha recibido nuevas cantidades de material alimenticio; por lo cual, desde ciertos puntos de vista, la sangre que llega a la aurícula derecha, es mejor que la que parte del ventrículo izquierdo. Únicamente le es inferior por lo que respecta a la composición de sus gases, y ésta precisamente es la que se modifica y regenera en los pulmones.