Invención del proceso mecánico para al fabricación de calzado


En 1845 fue inventada una máquina de cilindros, o prensa, que vino a reemplazar el duro trabajo de batir o machacar la suela. Con esta máquina, un hombre puede ejecutar en media hora el mismo trabajo que un operario en todo un día por el viejo sistema.

La primera máquina verdaderamente útil para coser calzado se debió al inventor norteamericano Gordon McKay, y fue montada en Lynn, en 1861, en plena guerra de Secesión. En ese tiempo, los abolicionistas tenían gran necesidad de calzado para sus soldados, pues casi todos los operarios zapateros se habían enrolado, y, además, la demanda era muy superior a la producción. Esta situación originó varios inventos mecánicos, hasta que McKay logró producir su máquina para coser.

La necesidad siempre creciente de calzado y la escasez de mano de obra impulsaron muchos progresos en la mecánica aplicada a esta industria; el más importante fue la invención de la máquina Goodyear para las viras. La patente de esta máquina, registrada en 1871, señala la iniciación de la etapa de fabricar rápidamente calzado en gran cantidad.