Las numerosas y variadas especies de frincílidos cantores
Tal vez sorprenda a muchos el saber que el canario silvestre es el serín, pero si se examina detenidamente al verderón, pariente muy cercano del canario, se comprenderá fácilmente. En su país natal, en las islas Canarias y en otras regiones, el canario tiene un color muy parecido al de los verderones, que son verde oliva por encima, amarillo por debajo y en alas y cola; sólo una cuidadosa selección practicada por los hombres les ha permitido obtener canarios amarillos y de otros colores. Los que ostentan entre sus plumas algunas de color verde o pardo es porque cuentan entre sus progenitores a verderones. Los rojos han sido alimentados con un cebo especial del mismo color, o cruzados con un pájaro llamado tarín. No existen canarios silvestres de color amarillo.
El canario es el pájaro que melodioso canto posee de todos los que viven encerrados en jaulas, siendo, como ya hemos dicho, muchas de sus notas muy semejantes a las del ruiseñor. Alegra nuestros hogares y suele vivir muchos años. El pardillo, otro fringílido cuyo canto recuerda el del canario, tiene el pecho y la cabeza rojizos cuando vive en libertad; pero si se lo priva de ella, pierde aquel color en la primera muda y se queda enteramente pardo. Anteriormente hemos mencionado ya al pinzón de las montañas de Europa septentrional, que desciende hacia el Sur en el invierno. Ahora es ocasión de dedicar cuatro palabras al bonito jilguero, de tan variados y vivos colores, al que suele verse revoloteando en los abrojales donde encuentra las semillas que constituyen su alimento.
El jilguero es un lindo animalito de unos 12 centímetros de longitud, con la cara roja, cabeza blanca y negra, cuerpo pardo claro por encima y blanco por debajo, y cola y alas negras y blancas, estas últimas con una ancha franja amarilla.
Los labradores ignorantes lo persiguen; pero no hay ave que más beneficios les preste. Durante la primavera y el verano los jilgueros devoran miríadas de insectos perjudiciales, y el resto del año se alimentan exclusivamente de semillas de hierba los que son también dañinos para los labradores.
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