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El brillante plumaje de las aves del paraíso

Una de ellas es conocida con el nombre de ave del paraíso de doce alambres, y vive en el centro de Nueva Guinea. Su cola es corta y cuadrada, pero posee doce apéndices caudales, largos y enhiestos, de hasta 30 centímetros de longitud, que no son otra cosa que los cañones desnudos de otras tantas plumas, situadas hacia los lados de las alas, y que dan al ave el aspecto más extraño. Los principales colores de su magnífico plumaje son el bronce purpúreo en la cabeza, verde purpúreo y negro en el cuello, bronce y verde en el dorso, y verde esmeralda en el borde de las plumas exteriores de las alas; el resto de éstas y la cola es púrpura violeta brillante, siendo el pecho de un hermoso amarillo. La longitud del ave es (incluyendo los cinco centímetros de su pico) de treinta centímetros. Su largo pico le suministra el sustento que recoge de las flores.

Existe un ave del paraíso de mayor tamaño, la de cola larga, de las montañosas regiones de Nueva Guinea, cuya longitud es de un metro. Sus colores son tan hermosos como los de otras especies, pero posee además un adorno de plumas en forma de abanico que se levanta a los dos lados del pecho y cuyos bordes exteriores son de colores verde y azul brillante, siendo la pluma de la cola de un delicado tono azul. Esta ave es blanca por debajo, y cuando levanta las largas plumas laterales de su pecho ofrece uno de los más hermosos espectáculos que pueden verse.