Un admirador de Pestalozzi, Federico Frobel. Los primeros kindergarten
La influencia de Pestalozzi se extendió rápidamente más allá del ámbito de las escuelas que él fundara. Fichte, el filósofo alemán, en sus famosos Discursos a la nación alemana, señalaba con entusiastas palabras al educador popular de Iverdon, que con sus ideas sobre la cultura elemental indicaba el esfuerzo como el camino recto. Tanto von Stein como Guillermo von Humboldt, consejeros del gabinete prusiano, participaron de la misma opinión, lo que determinó que dicho gobierno enviara una serie de maestros jóvenes a Iverdon para que aprendiesen los métodos de Pestalozzi y los implantasen en toda su amplitud. El resultado significó el surgimiento en suelo alemán, de varias escuelas pestalozzianas. Entre quienes conocieron la pedagogía del maestro suizo y propagaron sus ideas por Alemania, ninguno lo hizo con tanto fervor como Federico Frobel. Su amistad con Pestalozzi, a quien conoció en Iverdon, se mantuvo a través de los años. Partiendo de las ideas del maestro de que la educación
del hombre debe orientarse de un modo metódico desde la primera infancia, Frobel creó los primeros jardines de infantes (Kindergarten), donde trató de fomentar de un modo conveniente la educación física, intelectual y sentimental de los niños en edad preescolar. La institución, vivamente combatida en los orígenes, se ha extendido hoy por todos los países del mundo con gran éxito.
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