Estados Unidos entra en la guerra al lado de los aliados


Los alemanes, en su afán de terminar rápidamente la guerra, comenzaron a valerse de medios que fueron censurados por los países neutrales, en especial por Estados Unidos de América. Bombardeos de poblaciones civiles, ataques con gases venenosos, y el hundimiento de buques de pasajeros como el Lusitania y el Sussex, que sin artillar y con pasaje de civiles fueron torpedeados; y esta decisión alemana de torpedear todo barco, neutral o no, que se cruzara con sus submarinos, colmó la medida. Wilson, a la sazón presidente de Estados Unidos, envió al Congreso un pedido de declaración de guerra a Alemania, que fue aprobado, y a partir del 6 de abril de 1917 quedó declarada la guerra a Alemania. Lo mismo hicieron otros países americanos, y algunos de Asia, África y Europa, como China, Siam, Liberia y Portugal.

La entrada de Estados Unidos en la guerra no se hizo sentir en el primer momento, pues este país carecía de servicio militar obligatorio y se vio precisado a adiestrar grandes masas de combatientes que nunca habían recibido instrucción militar. Desde el momento de la declaración de guerra hasta el año 1918, las tropas estadounideses no intervinieron en la lucha, y se prepararon adecuadamente para hacerlo con éxito. Por otra parte, en los teatros de guerra continuó la lucha de desgaste y pocas variaciones sufrieron las líneas de trincheras.