Los pequeños portadores de la hemoglobina, la materia colorante de nuestra sangre


Entonces, ¿cuál es la utilidad de los glóbulos rojos que existen a millones y millones en nuestra sangre? La respuesta es que sólo sirven de vehículos o portadores de la preciosa materia colorante que contienen. Esta sustancia roja tiene un nombre que debemos tratar de comprender.

Este nombre es el de hemoglobina, cuya primera mitad significa sangre, en griego. Los diversos compuestos que se obtienen al descomponerlo son por sí solos tan complicados como cualquier otro compuesto conocido. Hemos visto en otro capítulo de este libro que el agua está formada de moléculas, cada una de las cuales está constituida por tres átomos. En cada molécula de hemoglobina hay probablemente mil átomos, por lo menos. Los principales son de carbono, hidrógeno, nitrógeno y oxígeno; pero uno de ellos, y el cual es de absoluta necesidad, es un átomo del metal hierro.

Así, la hemoglobina sigue la regla según la cual los compuestos de hierro son generalmente colorados. Es interesante recordar que, así como el hierro es necesario para el compuesto colorante más importante del cuerpo animal, también el hierro se encuentra siempre en el compuesto más importante del organismo vegetal.