Por qué suenan de distinto modo los diversos instrumentos


Estos armónicos ofrecen sumo interés a los que se dedican al estudio del sonido o al de la música. La diferencia que hay entre las distintas voces o los distintos instrumentos, aunque den en cada caso la misma nota fundamental, es debida a la calidad, al número y a la intensidad de los sonidos concomitantes. Esto viene a significar que casi todas las notas musicales que oímos no son realmente notas sueltas, sino más bien combinaciones de notas. En realidad, vienen a ser armónicos, sólo que apenas nos damos cuenta de ello, porque !a nota más baja del acorde es mucho más intensa que las demás, y sin embargo, estas últimas son las que constituyen la diferencia entre el sonido de un piano y el de un violín, o entre la voz de una persona y la de otra.

El interés que ofrece la música compuesta para varios instrumentos y para distintas clases de voces, consiste en la infinita variedad de efectos que pueden obtenerse mediante la combinación de instrumentos cuyos armónicos sean diferentes. Sea cual fuere el instrumento de que nos valemos, lo que conviene es que sus armónicos sean lo más abundantes y perfectos que puedan obtenerse. Esto se aplica de un modo particular al violín y a la voz humana.

Sabido es que ciertos violines fabricados hace muchos años, como los «stradivarius», por ejemplo, valen centenares de miles de pesos, mientras otros sólo valen unos pocos pesos; y el motivo es que, aun cuando se trate del mismo artista, del mismo arco y de las mismas cuerdas, los unos darán sonidos ricos, agradables y armónicos, mientras los otros no producirán sino sonidos ásperos y escuetos, que no merecen, en modo alguno, el nombre de música.