Lo que ocurre cuando un piano se encuentra desafinado
La causa es que el número de vibraciones de la nota no guarda la debida relación respecto de las demás. Desentona entre esas otras notas, o tal vez pudiera decirse que son ellas las que desentonan; sea esto como fuere, el caso es que la relación no es la que debiera ser. Si el error proviene de que el número de las vibraciones es demasiado pequeño, decimos que la nota es un bemol; si, por el contrario, el número de vibraciones es demasiado elevado, la llamamos sostenido.
Uno de los errores que se cometen con más frecuencia al cantar, o al tocar el violín, es el de convertir todas las notas en bemoles. Nunca puede perdonársele a un cantante o a un violinista el que desafine, por muy hermosa que sea la voz o el tono del instrumento, por muy perfecto que sea el compás, por muy exquisita que sea la expresión y la variedad de las modulaciones. Todo eso podrá estar conforme, pero, si es defectuosa la parte aritmética, el resultado no será verdaderamente musical, sino tan sólo una ruin parodia de la música.
Es natural que se nos ocurra preguntar qué significan esas teclas negras del piano repartidas entre las blancas, que componen la escala de do. Lo que hay es que el desenvolvimiento de la música se ha efectuado por etapas sucesivas. La primera etapa en la formación de la escala fue cuando la gama de cinco tonos se convirtió en la que todos conocemos, o escala ordinaria, lo cual vino a ser un perfeccionamiento, ya que nada se perdió con ello. Esa escala de cinco notas subsiste todavía, claro está, aunque va incluida en la otra.
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