Esplendor y colorido de la escuela veneciana
La primera mitad del siglo xvi fue el período áureo de la pintura veneciana. Todos los ricos comerciantes y nobles de la corte quisieron tener artistas a su servicio, y así, aunque les pagaban muy poco, es frecuente encontrar piezas decoradas con dibujos y figuras de grandes pintores, tales como Giorgione, el Ticiano u otro artista de renombre. Realizaron sus obras maestras, pero no tuvieron escrúpulos en decorar muebles u objetos de lujo, así como también paredes exteriores de los edificios. Mucho talento y trabajo se desperdiciaron de ese modo, pues la acción del viento, el sol y la lluvia empezó a deteriorarlos aun en vida de sus propios autores; otros, en cambio, pintaron por dinero y no por verdadera vocación artística.
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