Los chibchas, diseminados, no formaron una nación unificada


Habitaban la meseta de Bogotá en una zona extensa al norte y al sur del ecuador. Su lengua, fácil de catalogar, ha permitido reconocer a varios pueblos afines en esta zona. Los guétaros fabricaban sus casas con palos gruesos y hojas de palma, y llenaban sus templos de ídolos de barro y madera. En la zona de Costa Rica se han hallado esculturas de lava basáltica y piedras duras talladas finamente. En el istmo de Panamá también vivieron pueblos de lengua chibcha. de carácter apacible, dedicados a la agricultura y la ganadería. Al sur de Darién, región de fabulosa riqueza, vivían los cunas, de quienes se dice que habían recubierto su templo de oro y piedras preciosas. Lo cierto es que en esas tierras se halló mucho oro.

El grupo más numeroso de los chibchas se desarrolló en la actual Colombia, pero no constituyeron una nación unificada. En la época de la Conquista sus pueblos estaban gobernados por varios caciques, y cada agrupación tenía costumbres, ritos y organización propios, y hasta hablaban dialectos peculiares. Edificaron poco con piedra y de su industria quedan testimonios de cerámica muy bien elaborada. Sin embargo, la actividad característica de estos indígenas fue la metalurgia. Aleaban el oro, la plata y el cobre, y después de fundir las figuras las labraban con instrumentos hechos con este último metal.