Manuel Belgrano, precursor de la independencia y el creador de la bandera argentina
Entre aquellos que aún antes; de ese día presintieron el destino luminoso de estas provincias americanas cuéntase el abogado y general don Manuel Belgrano, nacido en Buenos Aires en 1770, a quien las azarosas circunstancias por las que atravesaba la revolución sacaron de su actividad y profesión, y llevaron, al frente de las legiones libertadoras de la Atenas del Plata, al corazón de la selva paraguaya o a las áridas quebradas del norte argentino. Pero la página más gloriosa de la vida de Manuel Belgrano fue escrita sobre las barrancas del río Paraná; allí creó y enarboló por vez primera la bandera argentina y la hizo jurar por sus soldados. La veneración de la posteridad ha erigido en ese mismo sitio, en la ciudad de Rosario, un templete de imponente estructura, el Monumento a la Bandera, que inmortaliza el histórico momento del 27 de febrero de 1812 en que los colores de la escarapela de Mayo se erigieron como símbolo de la nacionalidad argentina.
El general Belgrano condujo a la victoria a las legiones de la patria naciente en las jornadas de Tucumán y de Salta; supo de la amargura de la derrota en Vilcapugio y en Ayohuma; experimentó el dolor de intervenir en las guerras civiles al acercarse el año 1820, y murió, con la angustia del patriota que ve en peligro la existencia misma de la patria, el 20 de junio de ese año de prueba para la unión nacional.
Vocal en el primer gobierno patrio surgido en Buenos Aires, tuvo también influjo en el congreso que, reunido en Tucumán, declaró la independencia de las Provincias Unidas del Río de la Plata el 9 de julio de 1816; tanto Belgrano como San Martín abogaron ante aquella asamblea para que se diera el paso definitivo que transformaría la antigua provincia española del Río de la Plata en nación independiente y soberana.
La gloria de Manuel Belgrano ha sido inmortalizada por la posteridad en el mármol y en el bronce; sus cenizas descansan en el atrio de Santo Domingo, templo donde fue sepultado atendiendo a su última voluntad y donde se alza su mausoleo.
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