ACODO
ACODOS EN ARCO, MUGRÓN Y ONDEADO
Acodo en arco. — Se usa en los árboles que echan retoños en la base del tranco, pero es menester que dichos árboles sean robustos y cuenten uno o dos años de duración.
Para practicarlo se abren alrededor del arbusto unas zanjitas o regueras, de dimensiones proporcionadas a la longitud de las ramas que se desean tender, se sujetan las ramas en el fondo del hoyo por medio de unos ganchos de madera, y se mantiene la extremidad libre del ramo en posición vertical por medio de un tutor.
Estas acodaduras desarrollan bastantes raíces, de modo que pueden separarse de la planta madre, al cabo de uno o dos años. Este sistema se aplica a los árboles de corteza dura.
Acodo de mugrón. — Este acodo no es más que una variedad del acodo en arco; se practica en las viñas tendiendo horizontalmente en una zanja los sarmientos para que arraiguen y formen cepas nuevas para reemplazar a las viejas o cubrir las marras. La operación suele practicarse en febrero o marzo.
Acodo ondeado. — Practícase este acodo con ramas largas y flexibles de las plantas sarmentosas, corno madreselvas, vides, etc.
La rama elegida se va encorvando por secciones de unos 60 a 70 centímetros, de modo que quede la parte elevada de cada curvatura fuera de tierra, y la parte baja enterrada y sujeta con una estaquilla como se ha indicado en el caso anterior, y al fin la extremidad libre del ramo se mantiene vertical con un tutor.
Las porciones arqueadas del vástago que quedan fuera de tierra, han de llevar algunas yemas que son las que después han de producir tallos y ramas, en tanto que las partes enterradas echan raíces. Así que esto se ha verificado se van cortando los trozos y se obtendrá por cada arco una nueva planta.
El acodo en agricultura
Acodos por raíces, hijuelos y retoños
Acodos en arco, mugrón y ondeado
Acodos en cepillón, chino y en tiesto o tonel
Acodos por torsión, ligadura, incisión y canastillo
Precauciones generales al efectuar acodos