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Un gran ingeniero que murió de tristeza

Uno de los tipos de puentes más hermosos es el de brazos de acero, mera copia, sin embargo, de los más antiguos. En efecto, si dos troncos de árboles se inclinan sobre el agua desde diferentes orillas de un arroyo, no tenemos más que colocar un tablón desde el extremo de uno de ellos al del otro para hacer un sencillo puente de este tipo. Ésta es una de las formas de aplicarlo. La otra es considerar el brazo como un puntal. Firmemente asegurado en un extremo, un puntal resistirá con seguridad un gran peso; pues bien, los brazos de acero que forman un puente no son otra cosa que enormes puntales. Un ejemplo interesante nos lo ofrece el gran puente del río Forth, en Gran Bretaña.

Muchos fueron los esquemas que se propusieron para la construcción del Forth, que fue finalmente confiada a sir Tomás Bouch, el mismo ingeniero que había construido el famoso puente del Tay. Pero de repente, una terrible noche de invierno, en 1879, parte de éste se vino abajo, y con él cayó en el río un tren cargado de pasajeros, todos los cuales perecieron ahogados. La catástrofe conmovió al país entero, y a sir Tomás le llegó tan al alma, que murió de pena; mas el puente Forth, encomendado a otros ingenieros, continuó siendo objeto de particular atención y estudio. Era necesario cruzar dos canales separados por una isla, cada uno de los cuales, de curso rápido y profundo, medía unos 500 metros de anchura. No se veía posibilidad de sumergir pilares en estos canales, por lo cual hubieron de resignarse los constructores a levantar el pilar central en la isla y los otros dos, uno en cada orilla, muy cercanos a la costa. Así, pues, por el sistema de brazos, de los cuales había tres pares, se tendió el puente sobre las dos dilatadas corrientes de agua. Cada uno de ellos medía 450 metros de largo, y los tres, extendiéndose el uno hacia el otro, dejaban dos espacios de 12 metros cada uno que debían ser cubiertos. A fin de que pudieran pasar las embarcaciones, se le dio una elevación de 15 metros sobre el nivel del agua en la alta marca; y sus partes culminantes distan de este nivel 120 metros.