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Las hojas del cornejo florido tienen forma de corazón

Tanto en los países fríos como en los de clima cálido, en Europa, Asia y América, se encuentran extendidas las varias especies de cornejo. Aquí trataremos una de las más interesantes, el cornejo florido. Entrados ya los días primaverales, este arbusto se muestra cubierto de espesa floración como nieve blanca, pero cada una de las flores verdaderas se halla oculta, cual si estuviera disfrazada con una especie de manto blanco formado por lo que se cree que son, a primera vista, anchos pétalos. En realidad, esa capa nívea son los verdaderos pétalos, pero los creería tales cualquier persona que no sea versada en botánica. En el interior se hallan las diminutas flores propiamente dichas, cada una de las cuales es perfecta en sí, de delicada contextura y pálidos matices, con cuatro incisiones en los bordes de la corola. Las hermosas hojas nevadas, en forma de corazón, que denominamos pétalos primeramente, son en realidad brácteas, esto es, hojas de especial estructura, las cuales envuelven la flor o están pegadas a ella, y la cubren enteramente cuando todavía se halla en estado de capullo. Entonces son verdes estas hojas; pero van mudando de color hasta quedar del todo blancas, al paso que se abren a las caricias del sol. Tienen la misión de atraer a los insectos hacia las florecillas, y sirven de plataforma, donde se posan aquellos para libar el néctar, que está oculto en el fondo de los cálices. Los frutos son pequeños y rojos.

Hay especies de cornejos que se encuentran con frecuencia a orillas de los caminos, mientras otros, en particular el cornejo circulado, que tiene la hoja redonda, prefieren los terrenos pedregosos y sombreados de los bosques. Este último presenta grupos achatados de flores en forma de estrella, algo mayores que las de la especie descrita anteriormente, y del todo blancas, aunque carecen de aquellas preciosas brácteas.

El cornejo sanguíneo es un arbusto grande, con las ramas de un raro color rojo sangre, hojas vellosas, y flores blanquecinas y fruto de tamaño reducido, globoso y negro. Se cultiva como ornamental por su extraño aspecto.