El dragón volador que caza en el aire con un paracaídas


Dejando este grupo de pequeños saurios, que tan tardos suelen ser en sus movimientos, trasladémonos al extremo opuesto, donde encontramos uno tan ágil que se llama dragón volador. No es un lagarto de grandes dimensiones, puesto que sólo tiene hasta 25 centímetros de longitud; pero es muy interesante para nosotros porque nos muestra los cambios que pueden operarse en la estructura de individuos pertenecientes a la misma familia. Este pequeño lagarto vive entre los árboles y se alimenta de insectos. Por grande que sea la rapidez con que se mueve, no es bastante para que pueda coger los insectos que vuelan en los árboles en los cuales caza, por lo que la Naturaleza lo ha provisto de una especie de paracaídas a ambos lados y a lo largo de todo su cuerpo.

No es como el paracaídas de otros animales voladores. En el caso presente las costillas del animal se proyectan fuera del cuerpo a mayor distancia que las patas, y sobre ellas se extiende una piel que las cubre. Las costillas son movibles de tal manera, que el pequeño saurio puede plegar su paracaídas cuando no lo necesita. Para lanzarse de un árbol a otro o desde una altura al suelo, extiende sus alas y planea tan rápidamente, que la mirada no puede seguirle de una rama a otra; puede salvar una distancia de hasta nueve metros en la dirección que él lo desee.