¿Por qué quema el latón ccuando lo restregamos contra una superficie de madera?
Con la palabra fricción, que proviene del latín, queremos significar el acto de restregar o frotar una cosa contra otra. Puede haber fricción entre lo exterior de un objeto y lo interior de otro, o en lo interior de una misma cosa, como cuando agitamos el agua y rozan así sus moléculas las unas contra las otras. Si evitamos que el calor del agua se escape, podemos hacer hervir el agua fría con sólo agitarla prolongadamente.
Ahora bien, el calor es realmente una clase de movimiento: un movimiento especial de las moléculas de la materia. Teniendo esto presente, lo demás se explica fácilmente, porque nada hay tan sencillo como la transformación de un movimiento en otro de otra clase cualquiera. Cada vez que tiramos al aire una pelota, el movimiento de las fibras de nuestros músculos se transforma en movimiento de dicha pelota. Cuando el vapor arrastra una locomotora, el movimiento de las moléculas del vapor caliente se transforma en movimiento de las ruedas, aquél pierde su calor.
Y así como el calor puede ser transformado en un movimiento cualquiera, así también un movimiento visible, de cualquier especie que sea, puede ser transformado en esa clase especial de movimiento que se llama calor. Eso es justamente lo que ocurre cuando frotamos el latón contra la madera. Obsérvese, de paso, que en los fenómenos naturales no hay cosa alguna que provenga de la nada: si se manifiesta la clase de movimiento que llamamos calor, debe agotarse la que denominamos fricción; y cuanto mayor sea la fuerza con que frotemos, mayor será también la cantidad de calor que se origine. Si no existe fricción, o es muy pequeña, como cuando algo se desliza suavemente sobre el cristal o el hielo, no se producirá calor alguno, o, si se produce, será en insignificante cantidad, porque no hay pérdida alguna de movimiento visible, o es muy escasa, si la hay. Es decir, que toda nuestra energía o casi toda ella se transforma en movimiento visible, así que no queda ninguna para convertirse en calor. Mas, como la madera detiene el movimiento del latón, la energía que desarrollamos se transforma en calor, que aumenta la temperatura de ambos objetos.
Pagina anterior: ¿Se mueven realmente todos los objetos en el espacio?
Pagina siguiente: ¿Cómo nos transmitimos los resfriados mutuamente?