Platón fue discípulo de Sócrates, y Aristóteles, discípulo de Platón


Platón, discípulo de Sócrates, continuó enseñando al pueblo lo que había aprendido de su maestro, y muchas otras cosas que indudablemente debían de ser verdad, si era verdadero lo que de Sócrates había aprendido. Sus obras son muy sabias, y están escritas de manera tan agradable, que no pueden menos de cautivar la afición de quienes son capaces de entenderlas, pues a veces son de muy difícil comprensión, ya que tratan cuestiones sumamente arduas aun para los filósofos de hoy día.

Después de Platón, vino su discípulo Aristóteles, el cual fue a su vez maestro de Alejandro Magno. Este filósofo escribió muchas obras, pero considerando las cosas desde otro punto de vista que Platón; y por cuanto los que amaban la sabiduría por sí misma se inclinaban a veces a considerar las cosas según el sistema de Platón, y a veces según el de Aristóteles (sistemas que eran los únicos de aquellos tiempos), se llamaba a los filósofos platónicos o aristotélicos, aun cuando en realidad ellos no pensasen así. Platón pensó como un poeta y Aristóteles como un hombre de ciencia.