Los bosques que hacen de Canadá un país próspero y hermoso
El atractivo de los bosques de Ontario en otoño, con los rayos que el sol poniente arroja sobre un sinfín de kilómetros de hermosos y corpulentos árboles, tiene fama en el mundo entero. Millares de hombres se
dedican en estos bosques a talar árboles y preparar troncos y tablones para ser enviados a remotos países. Trabajan en invierno, viviendo en campamentos. Entonces el ruido de las hachas, el arrastre de los trineos por encima de la nieve congelada, cargados de leños y maderas, dan al bosque, antes desierto, un magnífico aspecto de vida y animación. Cuando en la primavera se deshielan los ríos, las aguas arrastran los troncos, y la fuerza de los rápidos y cascadas se utiliza para mover las máquinas de descortezar y aserrar maderas.
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