Cómo se mantiene la vida en calor


Ahora comparemos con los peces los animales de sangre caliente. El pez que tenemos en la mano es frío, y la mano, caliente; nuestro cuerpo entero está caliente, y por esto las otras cosas -a no ser que hayan sido calentadas especialmente- se sienten frías al tacto. La verdad es que los animales que respiran aire pueden emplear tanto oxigeno como quieren, y cuando han tomado todo el que requieren para sus necesidades imprescindibles, pueden- y esto es lo que los peces no pueden hacer-tomar más para sus lujos. Lo que hacen es simplemente encender una especie de fuego dentro de sí mismos, y así se mantienen en calor. El animal de sangre caliente tiene más calor que lo que le rodea porque elabora mayores cantidades de calor dentro de sí mismo, con la ayuda de grandes provisiones de oxígeno que saca del aire.

Ahora bien, ¿para qué sirve esto? ¿Por qué será que los animales de sangre caliente son mucho más inteligentes y maravillosos que los de sangre fría que encontramos en el mar, o que los animales humildes de sangre fría que encontramos en la tierra, como, por ejemplo, el sapo? Esto no lo comprenderemos bien hasta que sepamos a fondo lo que es un animal de sangre caliente.