Los usos de la sal y el oficio que desempeña en nuestra vida


Solemos considerar la sal común como una sustancia para dar sabor a los alimentos, de igual modo que la pimienta y la mostaza; pero, al paso que éstas no son en modo alguno alimentos, la sal es indispensable para la vida, pues no sólo cumple un oficio esencial en la sangre y en los tejidos, de una manera que no comprendemos aún completamente, sino que es también el origen de uno de los principios que contiene el jugo estomacal o jugo gástrico, y sin el cual la digestión no podría realizarse o resultaría, por lo menos, en extremo dificultosa. Si recordamos que la sal común es el cloruro de sodio, no nos será difícil comprender el origen del ácido clorhídrico que se vierte en el estómago, unos veinte minutos o media hora después de haber comido.

Si se quema el cuerpo de un animal o de un ser humano, vemos que deja siempre cierto residuo de cenizas, constituido por las sales que no pueden ser quemadas. Entre las referidas sales se distinguen por su importancia las de cal, que dan consistencia a los huesos y a los dientes. Si se sumerge un hueso en un líquido ácido, que disuelva las sales que aquél contiene, vemos que el hueso se ablanda hasta hacerse cartilaginoso; así se comprenderá cuan importantes son las referidas sales para los niños que están formando sus huesos y dientes. Las sales de hierro son también indispensables para la sangre, y es muy fácil de demostrar que las lentejas y manzanas las contienen en abundante cantidad.