Biografia de Yeltsin, Boris
(Sverdlovsk, hoy Ekaterinburg, actual Rusia, 1931) Político ruso. Durante su juventud actuó al margen del Partido Comunista, en el que ingresó en 1961, para abandonarlo treinta años más tarde, al exigir mayor profundidad en el proceso de cambio abierto con la perestroika en el sistema soviético. Para entonces había realizado una rápida carrera política: en 1976 era secretario del partido en su ciudad natal, y en 1985, miembro del secretariado central y jefe del PC en Moscú. Sin embargo, en los años siguientes fue depuesto de todos sus cargos a causa de su radicalismo frente a los sectores conservadores que lastraban los cambios impulsados por Gorbachov. Su actitud le convirtió en figura sobresaliente del bando reformista, lo cual le llevó a entrar en 1989 en el Sóviet Supremo, como diputado por Moscú, con el mayor número de votos de toda la URSS. Pero la celeridad con que se producían los cambios, le indujo a abandonar el partido al año siguiente. En junio de 1991 ocupó la primera presidencia de la Federación Rusa merced al sufragio universal. Durante el golpe de Estado de agosto de ese mismo año, tomó el mando de la resistencia civil y militar. Tras la desaparición de la Unión Soviética, Yeltsin se perfiló como el político más hábil y confiable a los ojos de Occidente para gobernar Rusia, un país afectado por un grave descontento social a raíz de las reformas económicas y de la virulencia de las reivindicaciones nacionalistas de las repúblicas que integraron la Federación Rusa. La rapidez con que aplicó reformas orientadas a la economía de mercado minó todavía más las condiciones de vida de la población, razón por la cual la agitación social alcanzó un punto crítico en el otoño de 1993. En esta ocasión, no dudó en recurrir al ejército para desalojar y disolver el Parlamento, donde se habían amotinado los diputados, y convocar elecciones encaminadas a aprobar una nueva Constitución, en la cual se reservó amplios poderes. Sin embargo, su salud empezaba a flaquear, y a raíz de su primera cardiopatía, en 1989, la oposición comenzó a cuestionar su capacidad física para dirigir el país. En 1996, la cruenta guerra de Chechenia y la durísima campaña electoral, cuyos ajustados resultados le obligaron a incorporar al gobierno a los nacionalistas y a pactar con los antiguos comunistas, fueron circunstancias que minaron aún más la quebrantada imagen del presidente ruso, quien con posterioridad ha debido afrontar serias y profundas crisis de gobierno, la situación de bancarrota económica del país, la corrupción administrativa y el creciente poder de las mafias.