Biografia de Hemingway, Ernest
(Oak Park, EE UU, 1899-Ketchum, id., 1961) Escritor estadounidense. El modelo de novelista moderno que encarna Hemingway descansa sobre su leyenda personal, en la que su obra y su vida se confunden; leyenda que si bien no creó él mismo, sí alimentó sin descanso. Marcado por la relación conflictiva con su padre, que se suicidaría en 1928, se aficionó desde joven al deporte y la caza. Al acabar sus estudios medios, en 1917, renunció a entrar en la universidad y consiguió trabajo en el rotativo Star de Kansas City. Al implicarse Estados Unidos en la Primera Guerra Mundial, quiso alistarse en el ejército, pero fue declarado inútil a causa de una antigua herida en el ojo, por lo que hubo de conformarse con servir en la Cruz Roja. Fue conductor de ambulancias en el frente italiano, donde resultó herido de gravedad poco antes de cumplir diecinueve años. De vuelta en su país (1919), se casó con una amiga de infancia. Pronto volvió a Europa para instalarse en París como corresponsal del Toronto Star. Allí inició su formación de escritor, apadrinado por Gertrude Stein y Ezra Pound. Con su primera novela, Fiesta (1926), le llegó la fama, que consolidó en 1929 Adiós a las armas, basada en sus experiencias en la guerra. En 1927 regresó a Estados Unidos, donde se casó en segundas nupcias y en 1930 compró su casa en Cargo Hueso (Florida), que desde entonces sería su «base» y su lugar de trabajo, pesca y descanso. Su presencia en España durante la guerra civil como corresponsal le inspiró una de sus más relevantes novelas, Por quién doblan las campanas, y su única obra de teatro, La quinta columna. Tras la Segunda Guerra Mundial, prosiguió sus viajes, fuente inagotable de material literario, por sus países preferidos: España y Cuba. También frecuentó África, donde pudo dedicarse libremente a su segunda gran pasión, la caza. La publicación en 1951 de A través del río y entre los árboles marcó una fase de cierto divorcio con el público, que enmendó unos años más tarde con una novela corta, El viejo y el mar, que aspira a un profundo simbolismo a partir de personajes y situaciones casi esquemáticos, y gracias a la que recuperó el favor de público y crítica. En 1954 recibió el Premio Nobel de Literatura y, poco antes de suicidarse de un escopetazo, redactó su testamento literario, París era una fiesta (póstuma, 1964), que relata los recuerdos de sus primeros años en París, en los que, según sus propias palabras, «éramos pobres y muy felices», su encuentro con los miembros de la Generación perdida, que acabó capitaneando, y sus primeros pasos en la literatura. Si bien debe su fama principalmente a la novela, sus primeros escritos, que muchos críticos han coincidido en señalar como lo mejor de su producción, son relatos breves; las narraciones de la serie dedicada a Nick Adams constituyen un ciclo educativo único, de un volumen a otro, a pesar de su aparente desorden. En ellos se encuentran todos los grandes temas que informan su literatura posterior y se establecen sus rasgos más característicos: la obsesión por la muerte, la voluntad de reconducir un mundo personal, imaginario, consciente de sus propios límites y de su fragilidad, la evocación constante del exilio y del viaje, y una cierta forma, precaria pero intensa, de épica moderna, en esencia a través de la caza, el toreo y la guerra. Hemingway constituye, junto a Faulkner, la figura más relevante de la literatura estadounidense de la primera mitad del siglo XX y uno de los escritores contemporáneos más influyentes e innovadores, tanto por su estilo seco y preciso, en el que algunos críticos han querido ver una tendencia al «telegrafismo», como por su capacidad para resumir en sus héroes su propia vida y las tensiones morales de la década de 1920.