1. Introducción Se hace difícil escribir algo sobre un gigante de nuestra
historia. Se torna problemático trazar el perfil de una personalidad avasallante
y polémica, como lo fue y aún hoy lo sigue siendo don Domingo Faustino Sarmiento,
protagonista sin igual de un período de turbulencias político-sociales por demás
apasionante .
Que no se dijo ya, del maestro de América? Se puede agregar
algo más sobre tan insigne prócer? A fuerza de ser sincero, confieso que
me tiembla el pulso al emprender tamaña tarea: describir en pocas palabras su
obra transformadora. Pero a fuerza de ser sincero, también debo agregar
que me causa un placer enorme acometer el trabajo encomendado. De otra manera
estaría privándome de disfrutar de su intimidad, conocer sus alegorías y sus desdichas,
de valorar en la exacta dimensión su estatura de escritor , educador y estadista
. Luchar contra el atraso, la miseria y la barbarie ; pelear contra la
pobreza , la ignorancia y la incomprensión , ciertamente no es tarea fácil . Esas
batallas serán reservadas a los elegidos , hombres de carne y hueso dotados de
una chispa divina . Sarmiento supo estar a la altura de las circunstancias
en que la vida lo colocó, el puesto del soldado que la patria le exigió, dentro
y fuera de ella . Su tarea civilizadora no conoció flaquezas. Calumniado, perseguido
y escarniado por la sinrazón, la enfrentó sin desmayos ni claudicaciones. Pero
el destino le tenía aún reservado el mayor de los dolores que padre alguno puede
soportar: la desaparición de su joven único hijo, Dominguito , como él solía llamarlo
, muerto en combate en el campo de batalla . El maestro fue plenamente consciente
del contexto real de la sociedad y la cultura de su tiempo, de las fuerzas materiales
e intelectuales que componían el escenario grande del siglo XLX. Las reacciones
que suscitó en parte de sus coetáneos, hasta los últimos años de su existencia
emprendedora y tenaz, se prosiguen en la posteridad como si el fuego sagrado de
sus ideas estuviera vivo y latente. Su vida la dedicó íntegramente a construir
una nueva sociedad sobre los escombros del régimen colonial, como si lo presionara
constantemente el temor de dejar incompleta su tarea. El ideal de patria con un
futuro promisorio lo empujaba permanentemente a trabajar sin descanso en pos de
lograrlo. Enamorado de la ciencia, como factor de transformación, lo asocia
a sus planes de cambio. Siendo Presidente de la República, dirige su mirada innovadora
a Córdoba, símbolo de la tradición hispánica, y produce actos deliberados de reforma,
cuyos enlaces y efectos están calculados , sin embargo , para toda la nación ;
funda la Academia Nacional de Ciencias , el Observatorio Astronómico y la oficina
Meteorológica. En el plano institucional , la obra de Sarmiento se mantiene
en pié . Tuvo una excelencia y una vastedad ilimitada . La defendió con ardor
cuando fue atacada ó se pretendió desvirtuarla .
La actitud de sus últimos años fue de vigilancia y combate
, pluma en mano , y aún viejo y enfermo, pedía un lugar relevante en la vida pública
para continuarla . Los odios de facción le han erosoniado en parte , y como todo
lo humano sigue abierta a los cambios históricos genuinos . El problema de su
vigencia ó caducidad parece encontrar una respuesta en los hechos que testimonian
su presencia efectiva , no sólo en lo educativo sino en lo político-social . Algunos
de los que niegan es porque discreparon y discrepan con la constitución que las
expresa , síntesis de las devociones del prócer. El legado sarmientino no
es una abstracción sino un pensamiento vivo, sin simetrías académicas , que no
vaciló en corregirse ó enmendarse , y es también una obra , a veces desigual ,
y por tanto perfectible , que lleva por dentro los rumores de la lucha que la
engendró . Dividirlo, fragmentarlo, podría quebrar la imponente unidad que adquirió
en el tiempo y conque sirvió y sirve a la República. Córdoba , marzo de
2001 2. El civilizador, el
estadista, el maestro. En 1842, Sarmiento funda y dirige en Santiago
de Chile en la proscripción, la primera escuela normal que se conoció en América
Latina. Años más tarde desde la presidencia de la Nación envía al Congreso un
mensaje redactado y firmado por su ministro Avellaneda en el que expresa que "Las
Provincias no tienen maestros. La escuela requiere ante todo la presencia del
maestro que es su alma y de la que depende su decadencia o progreso ". El
propósito del gran sanjuanino era principalmente combatir la ignorancia, salvar
a los pueblos de la barbarie y para todo ello nada mejor que la creación de establecimientos
oficiales para formar maestros. Con la propagación de las escuelas normales,
pudo resolverse en gran parte el problema del analfabetismo. De aquellas escuelas
normales salieron las primeras generaciones de maestros, que mal pagados, pero
con una vocación enorme de hacer patria, recorrieron de punta a punta el país
inaugurando cátedras de civismo, ilustraron a grandes y a chicos sobre cosas de
la tierra y por sobre todo hicieron algo grande: enseñaron a cantar el Himno Nacional
y sobre los ranchos y los humildes locales escolares, enarbolaron la bandera de
la patria. La figura gigantesca del Civilizador se levantaba en cada uno
de aquellos primeros y sufridos maestros, oponiendo al poder de los dictadores,
otros poderes para aniquilarlos: la escuela, el maestro, el libro y el periódico;
cuatro armas mortíferas que sin derramar una sola gota de sangre, podían servir
para ganar mil batallas. Esa figura gigantesca que aún hoy sigue generando
vivas polémicas ese "grande entre los grandes "como dice su himno, no era otro
que don Domingo Faustino Sarmiento, un maestro de escuela. Nació Domingo
F. Sarmiento un 15 de febrero de 1811, en la provincia de San Juan. Falleció un
11 de setiembre de 1888, en la República del Paraguay. 3.
Su formación intelectual Figura descollante en nuestro devenir
histórico, puede afirmarse sin lugar a dudas, que el núcleo central de su pensamiento
se encuentra en la generación de 1830, con las diferencias que pueden existir
entre un medio cultural del interior y otro correspondiente a Buenos Aires, a
lo que habría que agregar la tenacidad de su esfuerzo autodidacta. Sin estas referencias
casi obligadas, no podría interpretarse la línea filosófico-positivista un tanto
desdibujada, que entre los años 1880 y 1920 se desarrolla en la cultura argentina. La
comparación con Alberdi es imposible de obviar, surge espontánea y naturalmente.
Sarmiento no tuvo una formación filosófica académica, ni tampoco la ocasión de
profundizar tratados sistemáticos. Sus escritos, de una prosa muy personal,
revelan una filosofía de vida, una visión del mundo y del hombre, particularmente
de América. Su pensamiento se va forjando al compás de su existencia y de sus
luchas apasionadas. Su marcada vocación intelectual le permite aprovechar cuanto
recurso tiene a mano. En el período juvenil la religión cumple un rol importante;
luego se inclinaría gradualmente hacia el iluminismo . Rousseau lo impacta
profundamente entre 1827 y 1829; la lectura de Feijóo contribuye en el mismo sentido,
pero lo que constituye el detonante de su crisis existencial es el encuentro con
Castro Barros y sus denuestos ultramontanos . Cuanto autor iluminista cae en sus
manos, es leído ávidamente, devorado practicamente por Sarmiento, el que pese
a no haber recibido enseñanza académica ideológica , es por lejos superior a sus
contemporáneos . Las diferencias que se plasman entre un Sarmiento combativo,
apasionado y crítico por un lado y la mesura, el equilibrio y la diplomacia que
queda de la enseñanza de Alcorta por el otro, son abismales. La adhesión
al romanticismo le llega por intermedio de su amigo Quiroga Rosas. Sus ideas,
al menos en sus instancias centrales, son: visión dinámica y progresiva de la
historia; fé democrática; liberalismo religioso ; primado de la acción sobre la
teoría y la educación como único resorte válido del progreso . La asimilación
y comprensión de autores iluministas se encuentra claramente planteada en Civilización
y Barbarie. La estadía en Chile, donde se encuentra con Andrés Bello, pensador
influído por Víctor Cousin , su polémica con Alberdi , sus viajes por Europa y
E.E.U.U. acentúan largamente la relación con la cultura angloamericana , teniendo
entre sus efectos más visibles una consustanciación muy particular con el darwinismo
. 4. Escritor, político, filósofo, periodista, hombre
de bien. Cuatro obras literarias maestras. Facundo, ó Civilización
y Barbarie Es el libro más discutido de Sarmiento, y sin embargo, el más
conocido y el que temprano cimentó su carrera de escritor . Fue escrito, como
se sabe en Chile, para combatir desde el destierro el gobierno personal y despótico
de Juan Manuel de Rosas. Pero el protagonista , enseguida convertido en símbolo
histórico fue el caudillo riojano Juan Facundo Quiroga, exaltado por el autor
a la categoría de un producto típico y sobresaliente de la desaparecida sociedad
colonial y de las características peculiares de la vida en las campañas semibárbaras
. Una descripción extraordinaria , una correspondencia eficaz entre el hombre
y la tierra , que surge desde los primeros capítulos , revela la intuición formidable
del talento literario de Sarmiento, forjado en las lecturas y las discusiones
literario-filosóficas , más que del nexo directo con el historicismo de Herder
, y mucho menos con el de Vico . El pone de manifiesto indiscutido la fusión entre
hombre y mundo circundante . La naturaleza virgen le otorga al hombre el doble
carácter de la poesía y la desolación . Todo ello confluye en un vértigo existencial
frente a la naturaleza . La religiosidad del hombre frente a lo inconmensurable
de la pampa , no le alcanza para cubrir el desamparo que experimenta frente a
la disyuntiva terminal : vivir ó morir . La relación del hombre americano con
la naturaleza y la sociedad muestra un estado trágico en que ni la naturaleza
es madre ni la sociedad corruptora . Las dos están en lucha con el hombre ,quien
sólo podrá dominarlas por medio de la civilización . La triple relación : hombre
- naturaleza - sociedad , engendra dos frentes históricos muy contrapuestos por
Sarmiento : La Campaña y La Ciudad ; la Edad Media y la Edad Moderna ; la Barbarie
y la Civilización . Sarmiento mantuvo a lo largo de su vida una constante
atención a las repercusiones públicas y privadas de su libro . Demandó opiniones
críticas severas , y anticipó su disposición a escucharlas , entre otros , a Carlos
Tejedor , a Juan María Gutierrez y a Valentín Alsina . Nunca dejó de estimar las
observaciones que le hicieron , pero Facundo fue para él , a medida que crecían
su prestigio y los embates adversos , una incitación renovada . Más que
intuirlo , sabía que allí estaban anticipadas las proposiciones fundamentales
de su pensamiento . 5. Los Viajes Los
viajes de Sarmiento son un recorrido de sabor y de asombro , de variedad geográfica
, de referencias y confesiones acerca de los ideales del autor . Notable es la
descripción de los "caracteres morales " de los pueblos visitados , lo cual no
implica necesariamente el ejercicio del libre albedrío , sino características
que el hombre va adquiriendo por el encuentro entre su voluntad , la naturaleza
circundante y la convivencia humana : bárbara ó civilizada . El asombro
de Sarmiento ante la civilización norteamericana es tal , que los valores morales
alcanzan allí una altura considerable , debido a la herencia religiosa , a la
predicación bíblica y al encuentro con una naturaleza que encierra los caracteres
de una tierra prometida . Es la herencia moral que Inglaterra depositó en su seno
lo que dá a aquella audacia pionera los fundamentos de una grandeza moral . Es
el sentido altamente moralizador del cristianismo donde Sarmiento encuentra la
solución definitiva de todos los credos y de todas las sectas en una unidad. El
pensamiento del autor sobre lo moral , no reviste en él significación de interioridad
, sino más bien de irradiación social . Es la lucha por imponer la racionalidad
sobre la barbarie. Educación Popular El pensamiento del autor está
marcadopor la relación hombre - historia . La otra relación , hombre-naturaleza
, es el primer episodio más que el escenario de esa misma historia , en el que
la educación pasa a tener el lugar de la providencia. Lo natural , coincidente
con lo primitivo , es sólo un primer paso en el camino del hombre . La historia
es esencialmente conquista . La inteligencia y el sentido moral, alcanzan su despliegue
en el logro de un nuevo órden social ilustrado y progresista . El punto
de partida de Educación Popular es la necesidad de educar al pueblo para que esté
a la altura de sus derechos republicanos . El sentido pragmático se vuelca a una
educación entendida como acción de la razón. La pasión con que el autor intuye
la fuerza transformadora de la educación , es extraordinaria ; y debería concentrar
según él , toda la iniciativa y la atención del Estado . Sarmiento proyecta su
propia experiencia de estudios personales y de ejercicio del magisterio a la formación
de un programa cultural masivo , puesto al servicio de las nuevas instituciones
políticas . Recuerdos de Provincia Cinco años después de la aparición
de Facundo , que fue un libro de combate , salió a la luz pública "Recuerdos de
Provincia "( 1850 ) , sin que nada hubiera modificado las circunstancias políticas
del desterrado frente al gobierno de Rosas . Por el contrario ,se agravaron en
la víspera ; y hubo una intensa presión diplomática para obtener su silenciamiento
. Diversas interpretaciones se tejieron en torno al real contenido que sus
páginas encierran . Para Leopoldo Lugones es el " libro más sobrio y maduro ,
el mejor de Sarmiento literariamente hablando ". Desde ángulos distintos , han
coincidido en destacar la finalidad política sus dos biógrafos más importantes
de los últimos años : Ricardo Rojas y Allison Williams Banckley . "Si leemos Recuerdos
de Provincia - afirma Rojas , teniendo en cuenta las circunstancias históricas
y las intenciones políticas con que su autor las escribió , tal libro requiere
una nueva valoración .No es obra de mera recreación estética ; es un ariete más
del arsenal polémico . Los tres capítulos más difundidos - " "La historia de mi
madre" ; "El hogar paterno " y "Mi educación" , cargados de emoción humana - han
hecho olvidar otros : la evocación de San Juan con sus figuras coloniales ; los
retratos magistrales de próceres de la revolución de democrática ; la guerra civil
en que Sarmiento participa con valentía ; y el advenimiento de la tiranía de Rosas
, "a quien escarnece en las veinte páginas sobre don Domingo de Oro " .El escritor
norteamericano , por su parte , atribuye al libro un triple propósito : la censura
al gobierno personalista de los caudillos ; oponer a la tiranía las reformas positivas
que el autor venía proponiendo en otros escritos ; y ante todo , "limpiar el buen
nombre "del prócer, ante el pueblo de su propio país : "si Rosas iba a caer ,
y algún día tenía que caer , Sarmiento deseaba tener ante sí mismo y ante la población
de la Argentina no sólo un programa objetivo sino también una imágen subjetiva
de sí mismo favorable ". Escrito para defender la honra personal del vilipendio
del poder autocrático , Recuerdos de Provincia traspuso el ámbito individual y
se internó en la historia del suelo natal , que es apenas un trozo , una parte
, de una realidad mayor , la nación sojuzgada por la tiranía ; pero , en ese territorio
, en los hombres evocados , tenían vigencia austera los ideales con que las comunidades
fundadoras habían abrazado la Revolución de Mayo de 1810 . Recuerdos de Provincia
sirve a una lectura actual y futura de indomable energía moral , tan necesaria
en circunstancias de crisis , cuando los cimientos de la nacionalidad son amenazados
por el escepticismo o la decadencia cívica. 6. Conclusiones Sarmiento
es como Alberdi , una unión indispensable para entender el antes y el después
. Alberdi , formado en Bs. As. Hereda en cierto modo por vía directa la enseñanza
anterior , aunque la haya reformado con la influencia del romanticismo . Sarmiento
, al no tener una formación ideológica de escuela , asimila las ideas del iluminismo
francés de manera más directa a través de lecturas , discusiones y periodismo
. Retoma desde allí la línea culturalista de Rivadavia y su romanticismo aparece
claramente subordinado al romanticismo . Inicia así , una línea ideológica
nueva en la cultura argentina , que luego continúa con Ameghino , Ramos Mejía
, Agustín Alvarez y en general con aquella orientación que a partir de los años
80 se denominó positivismo argentino.
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