1. Introducción Piensa en dinosaurios realmente famosos: Stegosaurus,
Diplodocus, Triceratops, Tyrannosaurus... Todos ellos vivieron en América del
Norte. La mayoría de los dinosaurios que has oído nombrar se han encontrado allí.
¿Por qué? Hay varias razones.
Cuando empezó la Era de los Dinosaurios el clima era cálido
y seco. Hacia el Jurásico se fue haciendo más húmedo y crecieron muchas plantas,
que servían de alimento a los dinosaurios. América del Norte estuvo comunicada
al resto del mundo durante millones de años, por lo que los dinosaurios podían
ir y venir y extenderse con facilidad. Descubrimientos de desarrolladas especies
sugieren que Norteamérica perdió el contacto con Europa y Sudamérica, pero ganó
una conexión de tierra cerca del este de Asia al final de la Era Mesozoica.
Grandes manadas vagaron por las orillas de los ríos del Jurásico y las tierras
bajas del oeste hacia el mar dividieron en el Cretácico superior América de norte
a sur. En el oeste de Norteamérica, los ríos se desbordaban a menudo, ahogando
y enterrando a los animales que sorprendían. Sus orillas son buenos lugares para
buscar fósiles. En las tierras yermas, es decir, áridas, del medio oeste, la lluvia
y los vientos erosionan las rocas y dejan al descubierto los fósiles. Hoy, los
EE.UU. y Canadá tienen dinero para montar excavaciones de dinosaurios y también
gran tradición como buscadores de fósiles. América del Norte era el hogar
de algunos dinosaurios enormes, incluyendo el Ultrasauros y el Seismosaurus. Los
expertos creen que este último quizá fuera el mayor animal que ha existido nunca,
mayor incluso que la ballena azul actual. El
Ultrasauros era un saurópodo, pariente cercano del Brachiosaurus.
Un solo hueso de brazo era mucho mayor que un adulto humano. En vida, este increíble
gigante probablemente medía más de 30 metros de largo y más de 25 de alto. En
América del Norte vivían muchos otros saurópodos de cuello largo, incluyendo el
Camarasaurus, el Brachiosaurus, el Apatosaurus, el Diplodocus y el Supersaurus,
otro gigante casi tan grande como el Ultrasauros. Uno de los dinosaurios medianos
de América del Norte fue el Stegosaurus. Se han encontrado muchos de sus fósiles,
lo que demuestra que fue muy común durante 10 millones de años, a pesar de su
minúsculo cerebro, su pequeña cabeza, sus dientes de aspecto inservible y las
grandes placas del lomo. En el otro extremo de la escala se encuentran algunos
de los dinosaurios más pequeños. El Segisaurus sólo medía 1 metro de longitud,
pero estaba adaptado para la carrera. Corría sobre sus patas traseras, atrapando
animales pequeños con sus dedos provistos de garras. El Segisaurus era un primitivo
terópodo carnívoro que vivió en Arizona hace 180 millones de años. Se trata uno
de los pocos dinosaurios como las aves actuales. Las rocas del Triásico y
el Jurásico se extienden por toda la costa occidental de América del Norte, desde
Alaska hasta Colorado. Esas rocas se levantaron para formar las montañas rocosas,
y han dejado al descubierto muchos fósiles de dinosaurios. El estado de Utah es
uno de los mejores para buscar fósiles de dinosaurios. Se han hallado más de 5.000
dinosaurios. En 1953 se fundó allí el Dinosaurio National Monument, o Monumento
Nacional al Dinosaurio, donde los visitantes pueden contemplar a los científicos
extraer huesos lenta y cuidadosamente. El río Green discurre entre rocas que se
formaron hace 150 millones de años. En aquella época, un río prehistórico arrastró
dinosaurios muertos hasta las orillas arenosas y los cubrió de lodo, gracias al
cual se conservaron. Los hipsilofondóntidos son herbívoros bastante pequeños,
del Jurásico y Cretácico. El Dryosaurus, era uno emparentado con ellos, pero pertenecía
a otra familia. Medía casi 4 metros de longitud, del hocico a la cola, y era tan
alto como un adulto humano. Corría sobre sus patas traseras y con la cola en horizontal.
Buscaba las partes más sabrosas de las plantas, sirviéndose de los cinco dedos
de sus patas delanteras, provistos de garras. Algunos dinosaurios primitivos
eran pequeños, del tamaño de perros de compañía. Uno de ellos, llamado Scutellosaurus,
vivió en América del Norte hace 190 millones de años. Sólo medía 1.3 metros de
longitud, y la mitad correspondía a la cola. Al igual que sus primos de Europa,
África y Asia, era un animal muy veloz. Dejaba atrás a sus enemigos corriendo
sobre sus patas traseras. Tenía la protección adicional de pequeñas y duras placas
óseas sobre las piel. Los terribles Carnosaurios son dinosaurios carnívoros
que recorríeron América del Norte durante del Jurásico. Uno de los primeros fue
el Diplophosaurus. Tenía dos semicírculos de hueso de la cabeza, como la mitad
de un plato. Medía unos 6 metros de longitud. Quizá fuera un carroñero o persiguiera
a sus presas corriendo sobre sus patas traseras para atraparlas con las delanteras.
Los Carnosaurios se fueron haciendo mayores y más terroríficos a medida que transcurría
la Era de los Dinosaurios. El Ceratosaurus vivó hace 150 millones de años en Colorado.
Eraun poco mayor que el Dilophosaurus y mucho más pesado. Sus patas traseras eran
como troncos de árbol y las patas delanteras, muy pequeñas. Su cabeza, enorme,
presentaba rebordes óseos sobre las órbitas, y tenía un cuerno en el hocico. El
mayor carnívoro del Jurásico fue el Allosaurus. Sus mandíbulas eran más largas
que sus brazos y estaban forradas de largos dientes curvos. Pero el mayor asesino
aún estaba por llegar. Al final del Cretácico, hace 70 millones de años, apareció
el Tyrannosaurus rex. Para los dinosaurios, América del Norte era un lugar
inmejorable donde vivir, y donde morir y fosilizarse. Durante el Cretácico, estaba
separada de Europa y África. En ésta época, los dinosaurios Norteamericanos se
especializaron y se diferenciaron de sus parientes de otras zonas del mundo.
Alberta está en Canadá. Hace 75 millones de años era un hermoso paraíso subtropical,
las plantas con flores exóticas crecían entre marañas de helechos cicadáceas,
musgos y equisetos, en el lindero de los grandes bosques de coníferas. Alberta
sigue siendo un lugar hermoso, pero algunas de sus zonas se han encontrado en
desapacibles llanuras rocosas, a menudo cubiertas de nueve. Se trata uno de los
mejores lugares para encontrar dinosaurios, que vivieron y murieron allí en grandes
cantidad durante el Cretácico. En una zona de Alberta se han encontrado tantas
especies distintas de dinosaurios, que se ha convertido en un inmenso museo al
aire. Científicos de todo el mundo llegan al Dinosaurio Provincial Park, o parque
provincial del Dinosaurio, para estudiarlos. El parque es tan importante, que
se ha declarado Patrimonio de la Humanidad, como las Pirámides de Egipto.
Pero otros lugares de América del Norte, incluyendo muchos yacimientos de EE.UU.,
son terreno abonado para buscar dinosaurios. Algunos de los carnívoros más terribles
recorrían la frontosa Norteamérica hace 70 millones de años. Los había de muchos
tamaños y cazaban de distintas maneras, El más pavoro fue el gran Tyrannosaurus
rex, que tenía feroces parientes. El Daspletosaurus medía 9 metros de longitud
y todo él era enorme; la pesada cabeza, las mandíbulas llenas de dientes como
cuchillos de trinchar carne, las patas como troncos de árbol y la gran cola bamboleante.
El Albertosaurus vivió en el mismo tiempo y lugar; probablemente era más ligero
y cazaba presas más pequeñas. En América del Norte había peligrosos dinosaurios,
pequeños pero tan feroces como sus parientes gigantes. El Stenonychosaurus medía
2 metros de longitud y sólo 1 de altura. Los pequeños mamíferos parecidos a musarañas
y los insectos de la época debieron considerar a este animal un gigante espantoso.
Algunos científicos creen que se trata del mismísimo Troodon, uno de los dinosaurios
con el cerebro más voluminoso en relación con el cuerpo. Usaba sus grandes ojos,
que apuntaban hacia delante, para divisar animales pequeños. En estos lugares,
también hubo dinosaurios avestruz. Eran altos, esbeltos y bípedos, como los avestruces
actuales. Incluían al Ornithomimus, el Dromiceiomimus y el Struthiomimus. Medían
de 3 a 4 metros de largo y eran de constitución muy ligera, por lo que podían
moverse con agilidad. Probablemente se alimentaban de huevos, insectos anfibios,
reptiles y cualquier otro ser vivo que pudieran atrapar con su pico sin dientes.
En las exhuberantes selvas subtropicales de América del Norte, durante el Cretácico,
los herbívoros estaban a sus anchas, pero vivían por miedo de ser atacaron, por
los carnívoros, por lo que desarrollaron todo tipo de escudos y armas. Los
ceratópsidos, o dinosaurios con cuernos, sólo vivieron en Norteamérica. Desarrollaron
cuernos de distintos tamaños y en diferentes posiciones para ensartar al enemigo,
y placas óseas con el fin de protegerse el cuello. El Pentaceratops, que significa
cara con cinco cuernos, fue uno de ellos. Tenía un cuerno en el hocico y otro
sobre cada ojo. El cuarto y el quinto eran, en realidad, pómulos puntiagudos.
La larga placa ósea de su cuello, servía para defenderse y exhibirse. Probablemente
los ceratópsidos vivían en grupos, para mayor protección. Algunos dinosaurios
norteamericanos desarrollaron una armadura de placas duras, protuberancias y púas;
son los nodosáuridos. Los anquilosáuridos también tenían una pesada armadura.
El Ankylosaurus era uno de ellos y presentaba protuberancias óseas en la cabeza
y en todo el cuerpo, además de una gran porra en la cola. Hacia finales del
Cretácico los dinosaurios con pico de pato abundaban en este continente. Para
eso tenían que evitar con éxito a los carnívoros, pero os científicos no saben
con seguridad cómo lo conseguían. El Kritosaurus medía unos 9 metros de longitud.
Tenía grandes aberturas en las fosas nasales, que se elevaban formando un reborde
frente a cada ojo. Los hadrosáuridos, o dinosaurios con pico pato, quizá utilizaran
el hocico para emitir bramidos y trompeteos. Algunos de estos dinosaurios desarrollaron
extraños cuernos y crestas en la cabeza. Es probable que actuaran como instrumentos
de viento para emitir fueres sonidos. Imagina que te acercas furtivamente a uno
de estos dinosaurios y, de pronto, oyen un ruido atronador, como de un cuerno
de caza. Muchos depredadores habrían salido corriendo. Los hadrosaurios vivieron
hacia el final del Cretácico. Entre estos hadrosaurios, además del Kritosaurus,
se incluían el Prosaurolophus, el Saurolophus, el Parasaurolophus, el Corythosaurus,
el Hypacrosaurus, el Lambeosaurus, el Procheneosaurus y el Edmontosaurus. Las
pruebas sugieren que vivían en grandes rebaños, como las cebras actuales. 2.
Desarrollo Esta es una historia que sorprendió a todas las personas.
Con mucha razón; ya que aquellos animales que habían existido 120 millones años
atrás, los dinosaurios, tenían grandes historias y misterios que provocaban a
los cientificos a estudiar las icnitas, las formas de sus huellas, su profundidad,
su cantidad de dedos y muchas otras cosas. Procedencia La palabra dinosaurio
es procedente de lo griego{dino de terrible y saurio de lagarto} Se dice que la
primera huella de dinosaurio sé descubrio en 1802; por un granjero llamado Pliny
Moody en Massachussets. Este hallazgo pasa de inadvertido hasta mucho tiempo después. Descubrimientos
El primer descubrimiento fechado en Europa fue en 1828 en Escocia. En 1836 Edward
Hitchcock es decir el padre de el estudio de las icnitas. Este publico su primer
libro del estudio de las huellas fósiles, sin poder precisar bien lo escrito por
lo que seguía el estudio. En España los descubrimientos de icnitas comienzan
a finales del siglo XIX. Estas huellas reconocidas de antes por pastores, habitantes
de estas zonas han sido clasificados por ejemplo: Pisadas La Rioja que
se le atribuye a las pisadas de los caballos o a las huellas del gigantesco león.
Una región cubierta por bosques de árboles ignatos, húmedos e impenetrables, tierras,
cielos y aguas colonizadas por especies animales increíbles de las que hoy nos
quedan sus huellas labradas en la roca. Huellas de todos los tamaños, de diferentes
espacios, rastros y fósiles, todo ello lo podrá ver el viajero que quiera conocer
y descubrir muchas cosas interesantes sobre los dinosaurios. El conjunto de fósiles
conservado (unos 10.000 vestigios) hacen de La Rioja un lugar privilegiado para
conocer la vida de la Prehistoria. El viajero El recorrido a través
de los distintos yacimientos transportará al viajero a épocas remotas, cuando
la Tierra era dominada por los dinosaurios. . Los campos de icnitas están perfectamente
señalizados y los alrededores cuentan con caminos que permiten al viajero gratificantes
paseos por los montes admirando un paisaje abrupto y salvaje. Siguiendo la Ruta
nos adentramos en el Valle del Cidacos, montes áridos y pardos dan la bienvenida
al visitante quien en el término de Munilla, encuentra dos importantes yacimientos:
el de Peñaportillo, con el curioso rastro de la cola de un Dinosaurio. El
viajero debe seguir la Vía Cretácica hasta Préjano, pueblo de antiguo esplendor
y alrededores mineros donde se encuentran dos interesantes yacimientos. Desde
Préjano sale un camino a Peña Isasa, techo de La Rioja Baja, desde donde disfrutamos
de unas vistas impresionantes y otra vía que nos lleva a Enciso, último pueblo
regado por el Cidacos y que cuenta con una historia antiquísima. En esta localidad
hallamos la mayor concentración de yacimientos. Se puede decir que Enciso es el
centro de la Ruta de los Dinosaurios. El siguiente punto de nuestra ruta es Cornago
pudiendo llegar el viajero a través de carretera o por senderos señalizados admirando
el paisaje. El yacimiento de Los Cayos es el más importante de La Rioja encontrándonos
con huellas de grandes dinosaurios carnívoros que viendo su tamaño nos permite
adivinar el aterrador aspecto de estos animales. Existen varios cientos de huellas
de diferentes especies de dinosaurios. Adentrándonos en el corazón del Valle del
Alhama-Linares donde e encuentra el yacimiento de la Era del Peladillo que conserva
huellas de un dinosaurio nunca hallado en otro lugar que ha adoptado el nombre
de la localidad: el Hadrosaurichnoides Igeensis. La vía Cretácica además de evocar
la existencia de criaturas desaparecidas es una forma de conocer La Rioja más
agreste y recóndita plena de paisajes y leyendas como la que atribuía las huellas
al caballo del Apóstol Santiago o a un león que asolaba la comarca en tiempos
pretéritos. Modo de vida(ataque) Los dinosaurios atacaban respectivamente
según su tamaño con disferentes maneras. Los cazadores confian mucho en su rapidez
ya que el dinosaurio es mayormente grande. Los carnívoros siempre han utilizado
la fuerza bruta por lo que acorralan a su presa en manadas. Los herrerasaurios
son unos de los dinosaurios mas primitivos que se ha conocido hasta este momento.
Son característicos por ser altos como un hombre, con dientes muy afilados y puntiagudos
son generalmente pavorosos. No todos los dinosaurios carnívoros eran cazadores.
Los ovirraptorosaurios, que significa reptiles ladrones de huevos, necesitaban
otras armas para conseguir su comida. En lugar de hileras de afilados dientes
para desgarrar la carne, algunos no tenían dientes y otros tenían dos púas en
el paladar. Con las púas o el duro pico, rompían los huevos que robaban a otros
dinosaurios. Entre los tiranosáuridos, el Tyrannosaurus rex era el gigante de
los dinosaurios carnívoros. Aunque demasiado corpulento para emprender persecuciones
a grandes distancias, no solía tener dificultades para procurarse el alimento.
Si encontraba a otro cazador que acababa de derribar a un animal, lo ahuyentaba
y devoraba la presa. Los grandes cazadores actuales, como los leones, utilizan
las mismas tácticas para obtener comida sin esfuerzo. Es posible que tuviera un
arma secreta. Algunos expertos creen que este gigantesco cazador quizá matara
a sus presas infectándolas. Los dinosaurios herbívoros acorazados tendrían que
defender su vida. Un fornido Euoplocephalus, provisto de porra en la cola, habría
sido un enemigo peligroso. Un golpe bien dirigido de la pesada porra bastaría
para derribar a un tiranosaurio. Un herbívoro con cuernos, como el Triceratops,
también podía defenderse eficazmente. -Defensa: Muchos dinosaurios eran
pacíficos herbívoros, pero todos tenían que defenderse de los depredadores hambrientos.
Cada grupo de dinosaurios tenía una manera particular de defenderse de las agresiones.
Muchos de los grandes herbívoros se protegían viajando en manadas. Los dinosaurios
más pequeños empleaban la velocidad para escapar. Algunos herbívoros eran demasiado
grandes para ser atacados con éxito. Otros dinosaurios se ocultaban bajo una pesada
armadura. Una de las mejores defensas consiste en evitar ser visto. Muchos
cazadores rastrean a su presa con la vista. Quizá no vean a un animal que se confunda
con el entorno. Algunos seres actuales como el camaleón se defienden adoptando
el mismo color que su entorno. Los cazadores también utilizan la forma de identificar
a su presa. Los ciervos actuales tienen el lomo oscuro y el vientre claro para
defenderse con la vegetación. En los dinosaurios es probable que presentaran manchas
oscuras y claras de varias formas. Algunos herbívoros confiaban en su dura
piel para salvarse. Los dinosaurios acorazados, los Anquilosaurios, estaban cubiertos
por gruesas placas óseas de las que sobresalían púas. Algunos incluso tenían párpados
óseos. Cuando era atacado, se encogían y exponían sólo su caparazón acorazado,
como los armadillos actuales. Resultaba invulnerable a menos que su enemigo consiguiera
darle la vuelta. Pero eso habría sido equivalente a mover una piedra de dos toneladas.
Muchos animales indefensos ahuyentan a los agresores con su aspecto amenazador.
Un tipo de camaleón actual hincha su cuerpo y silba con fuerza abriendo sus mandíbulas
de vivos colores. El Parasaurolophus quizá utilizara su cresta hueca para bramar
a todo volumen. El Styracosaurus tal vez mostraba el cuerno de la cabeza y la
placa ósea del cuello, igual que el lagarto barbudo utiliza la piel de su garganta.
Muchos grandes dinosaurios herbívoros viajaban en manadas, y los adultos rodeaban
a las crías. Si caían en una emboscada, los adultos se volvían agresivos. Los
dinosaurios con cuernos quizá formaran una muralla defensiva, para ahuyentar a
los depredadores. La defensa definitiva de muchos animales consiste en contraatacar
con sus dientes, cuernos, garras o cola. Un golpe con la porra de la cola del
herbívoro Ankylosaurus podría romperle un hueso a su atacante. Los pacificos
herbívoros Ciertas preferencias de la naturaleza fue en algun momento la comida
y fuente de alimentacio para los dinosaurios herbívoros, como por ejemplo: los
helechos, majestuosos robles entre otros que marcaron ciertos cambios en la alimnetacio
de los herbívoros. Debido a la falta del gusto consumian venenos sin poder ser
advertidos. Su cuello uno de los mas largo entre el reino animal de varios metros
les permitian acercarse a mejores cogollos, y los plumeros sabrosos de araucaria
y palmera. Cuando las araucarias fueron disminuyendo en su cantidad los dinosaurios
sufrian epidemias y algunos morian. Las grandes masas continentales sufieron misteriosos
cambios en el planeta geológico. Estos animales de eras pasadas emigraban a medida
que los lugares pasaban a ser desiertos. Se dice que varios de estos animales
majestuosos tenian su cuerpo cubierto de plumas, mientras que la capa protectoras
de otros era de pelos, ya que la arrugada piel de los dinosaurios tenia placas
protectoras sobre su lomo. Un cerebro minúsculo Estos reptiles comprendian
un cerebro insignificante comparado con su volumen, por lo que podemos hacerlos
esta pregunta ¿ Como un centro nervioso tan pequeño puede condirnar tan movimientos
bruscos que efectua el dinosaurio? Utilizando la relación entre el peso del cerebro
y del cuerpo, se aprecian sorprendentes diferencias entre los dinosaurios
y los mamíferos: en el hombre, esta relación es aproximadamente de 1/60; en el
elefante 1/1.000 y solamente 1/100.000 en el gigantesco brontosaurio. La reducción
del cerebro se constata tanto en términos relativos como absolutos: en un estegosauro,
con una talla equivalente a la de un elefante, el encéfalo era apenas mayor que
un gatito recién nacido. Para compensar la pequeñez del cerebro los dinosaurios
estaban dotados de una medula espinal muy desarrollada, llegaron a ser en muchas
especies mas voluminosos que el propio cerebro. Huevos gigantescos
Muchos cientificos y personas que se han dedicado a ese oficio han encontrado
grandes huevos protoceratops en Mongolia. Los huevos de estos animales son oblongos
y miden alrededor de 21 centimetros de longitud. Lo interesante es En efecto,
nunca se han descubierto huevos fósiles cuya talla igualase a los que ponían las
aves mamut, de Madagascar, cuya capacidad era de 81. Los feroces predadores
Estos feroces predadores comprendian afilados dientes y poderosas garras que le
permitian acabar con otros dinosaurio mas grandes y fuertes entre ellos se encuentran
los tiranosaurios, el alasaurio de America del Norte y el carnotauro de America
del Sur. El carnotauro fue unos de los dinosaurios carnívoros del cretaceo. Vivio
en la America del Sur. . La reconstrucción de sus aspectos es exacta, pues es
unos de los escasos fósiles que se conservaron junto a impresiones de la piel
en la roca. El alasauro es otro de los grandes carnívoros El mas cruel y
el mas temible Estos temibles animales a pesar de pesar 7 Toneladas pueden
desplasarse hasta 25 km por hora. Al divisar a su presa, cargaba sobre su víctima
con sus garras preparadas y sus feroces mandíbulas abiertas. El ataque de unos
de estos poderosos monstruos pudo haber sido mas aterrador que el de un rinoceronte.
Se cree que fue muy ágil, pese a su enorme tamaño. La gran cola balanceada perfectamente
el resto de cuerpo y la inmensa cabezota. El ataque era incontenible. Eran frecuentes
los enfrentamientos entre individuos de la misma especie. La potencia de garras
y dientes de tiranosaurio terminaba en combate donde era difícil que hubiese vencedores
. Al volverse hacia sus víctima, la impresionante cabeza tiene que haber producido
una sensación aterradora que contribuiría a inmovilizar a la presa. Los dientes
de los dinosaurios eran reemplazados constantemente por nuevos, así que siempre
había varios con afilación perfecta. Los del tiranosaurio media mas de 10 centímetros
de largo. El dibujo compara, desde arriba hacia abajo, los dientes de un alasauro,
un reptil actual (El dragón de komodo) y un lobo. El tiranosaurio rex era capas
de abatir a un poderoso triceratops después de breve lucha. Hoy resulta difícil
concebir la agracibidad de estos feroces carnívoros, que unían la potencia de
un rinoceronte a la combatividad de un tigre de bengala. El nombre rey de los
tiranos (eso quiere decir tiranosaurio) párese muy apropiado. 3.
Pistas de la extinción de los dinosaurios Con base en observaciones
de satélites de la península de Yucatán en México, investigadores de la Dirección
Nacional del Espacio y Aeronáutica (NASA) y de Geo Eco Arc Research en La Canadá,
California, han identificado una cadena semicircular "casi perfecta" de agujeros
que parecen corresponder con el piso de un cráter gigantesco. La mitad de un diámetro
de unos 160 kilómetros parece yacer en la tierra y la mitad en el Golfo de México.
En los últimos años, simpatizantes de la teoría extraterrestre de la extinción
de dinosaurios han estado recolectando pruebas para sugerir que un asteroide "asesino"
pudo haber caído en Tierra en la parte noreste de la península de Yucatán.
Anormalidades en los campos gravitacionales y magnéticos, así como fragmentos
de vidrio natural encontrados en Haití, han sugerido la existencia de un cometa
enterrado o un cráter de asteroide en el área. "Prueba en superficie"
Pero en una carta al diario británico Nature, Kevin Pope de Geo Eco y sus colegas
dijeron que los agujeros encontrados constituyen la "primera prueba de superficie"
de un cráter, que ha sido llamado Chiexulub. El debate sobre cuáles fueron
las razones de la extinción de los dinosaurios y otras numerosas formas de vida
al final del período Cretáceo hace unos 66 millones de años ha estado llamando
la atención desde 1980, cuando el Premio Nobel Luis Alvares y su hijo, Walter,
propusieron que la extinción en masa fue causada por un enorme asteroide o cometa
que cayó en la tierra. Sin embargo, los oponentes aseguran que no es necesario
buscar en el espacio para explicar la extinción en masa, diciendo que otras fuerzas
de la Tierra como los volcanes podrían considerarse para explicar la desaparición
de los dinosaurios y sus contemporáneos. Pero Pope dijo: "la edad aparente,
localización y tamaño del presunto impacto en Yucatán lo hace como uno de los
mejores candidatos del acontecimiento catastrófico global, aunque impactos múltiples
permanecen como una posibilidad. Sin embargo, sólo el impacto de Yucatán podría
haber tenido una consecuencia devastadora en el clima, los animales y la flora
en la Tierra". Invierno nuclear que provoco la muerte de los dinosaurios:
Un meteorito que cayó sobre la Tierra hace 65 millones de años levantó nubes
de polvo suficientes para ocultar el Sol durante uno a dos meses, provocando un
"invierno nuclear" que causó la extinción de los dinosaurios, según estima un
geólogo estadounidense. Los científicos formularon hace tiempo teorías según
las cuales el impacto de un enorme meteorito fue el causante de la desaparición
de los dinosaurios en las postrimerías de la Era Cretácica. Jack Wolfe, de
la Oficina Geológica norteamericana, señaló en la revista científica Nature que
fue en realidad un "invierno de impacto" lo que provocó la extinción de los dinosaurios
al impedir el crecimiento de plantas, su principal fuente de alimentación.
Estudiando hojas fosilizadas en Wyoming, Wolfe dijo que encontró que todas las
plantas de tierra y mar murieron aproximadamente al mismo tiempo. Su estructura
celular indica que perecieron por congelamiento y la etapa de desarrollo hace
pensar que la fecha fue en junio. Formuló la hipótesis de que un enorme meteorito
cayó en la península de Yucatán en lo que ahora es México y provocó gigantescas
nubes de polvo y restos que impidieron el paso de la luz solar, como sucedería
después de una explosión nuclear. La desaparición de la luz solar hizo que
las temperaturas en todo el mundo cayeran desde un promedio de 19 grados centígrados
a 10 grados bajo cero. Los lagos se congelaron y miles de especies de plantas
perecieron. Según Wolfe, el invierno por impacto fue seguido por un período
de calentamiento global al desintegrarse las nubes de residuos y propagarse por
toda la atmósfera, reteniendo el calor solar como lo hacen el anhídrido carbónico
y otros gases de invernadero en la actualidad. De tal modo es muy probable
que las plantas que lograron sobrevivir a ese período glacial fueron eliminadas
durante la posterior etapa de calentamiento, y con ellas habrían perecido los
dinosaurios, dijo. Cuando cayeron los dinosaurios: Gracias a los recientes
descubrimientos geológicos se ha reforzado la teoría de que la extinción de los
dinosaurios hace 65 millones de años se debió al choque contra la Tierra de un
enorme asteroide que hizo su colosal impacto en la península de Yucatán (México),
provocando un desastre de tal magnitud que el planeta quedó sumergido en tinieblas
por un largo lapso, lo que produjo la desaparición de especies de animales y vegetales
incapaces de alcanzar la sobrevivencia en condiciones climáticas adversas.
Estiman los geólogos que en su momento el impacto proyectó a la atmósfera una
mezcla de vapores, gases liberados, polvo, residuos rocosos y metálicos cuyas
sustancias más volátiles, suspendidas en el aire y mezcladas con el humo provocado
por la frotación del asteroide con la atmósfera, envolvieron al planeta en una
gigantezca nube de oscuridad impenetrable por muchos años. Los restos incandescentes
caídos sobre los bosques y pastizales provocaron pavorosos incendios que abarcaron
más del 70% de los continentes, interrumpieron la fotosíntesis y redujeron prácticamente
a cero el índice de oxígeno, lo que hizo imposible toda posibilidad de vida tal
como estaba dada en la Tierra. Conclusiones: Yo he llegado a la conclusión
de que en la era de los dinosaurios se enmarco una etapa muy bella e interesantes
para el estudio y descubrimientos de los cietificos entre otros. Tambien que existian
muchas especies de dinosaurios que varios se mataban y se ilimitaban entre ellos
mismo. Como tambien en donde estos habitaban estaba constituido por enormes especies
vegetales con las cuales alguno de ellos podian subsistir y asi vivieron estos
en constante movimiento. Por lo que yo digo que los dinosaurios son animales muy
importantes ya que mediantes estos los cientificos descubren nuevas características
que no sa hayan descubierto.
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