Se establecieron un día en guerra las águilas y las liebres.
Fueron entonces éstas a pedirle ayuda a las zorras. Pero ellas les contestaron:
-- Os hubiéramos ayudado si no supiéramos quienes sois vosotras y si
tampoco supiéramos contra quienes lucháis. Antes de decidir emprender
una campaña, mide primero la capacidad de tus adversarios.
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